Tu empresa realiza exportaciones o importaciones y se encuentra con una deuda aduanera, ¿quién debe pagarla? Esta es una cuestión que surge tanto a nivel individual como de organización, pues ambos están relacionados con este tipo de obligaciones.
Lo más frecuente es que una deuda aduanera surja en relación a algún error en la gestión de la tramitación. El error puede cometerse en el proceso en que se rellenan los documentos o cuando se realiza el pago de los impuestos, si estos no se corresponden con la mercancía enviada.
Así pues, esta deuda está estrechamente relacionada con los impuestos y las mercancías. Cabe señalar que los aranceles son diferentes dependiendo del país en el que se realiza la operación. De hecho, cada estado tiene sus propias normas y aranceles, por lo que no resulta extraño que una empresa contraiga una deuda aduanera durante sus operaciones en comercio exterior.
Esta situación puede darse tanto en las exportaciones como en las importaciones. La sanción se realiza sobre sobre el producto y son pocas las opciones que se pueden llevar a cabo una vez contraída. Es por esto que la mejor recomendación que se puede dar a las empresas es que revisen bien la documentación y pagos antes de hacerlos efectivos.
Una vez contraída la deuda aduanera, es difícil anularla. Tienen que darse circunstancias muy muy concretas para su extinción, tal y como explica la Agencia Tributaria.
Deuda aduanera: ¿cómo se soluciona y cómo evitarla?
Solucionar la situación no es sinónimo de que el representante pague a título personal la deuda aduanera. La responsabilidad del pago tiene que ver con si la representación que se está haciendo es directa o indirecta. Esto quiere decir que hay que diferenciar cuándo el agente de aduanas actúa en nombre de una organización.
Las gestiones que sí se pueden llevar a cabo son:
- dirigirse al país de donde procede la sanción,
- consultar la autorización para conocer el error cometido,
- solicitar un aplazamiento del pago.
El conflicto puede evitarse contando con una empresa especializada en comercio exterior que asigne un representante de aduanas para el seguimiento de tu mercancía. Estos profesionales están realmente acostumbrados a este tipo de trámites y son quienes mejor conocen la legislación de cada país. Contar con ellos reduce las posibilidades de meter la pata en alguno de los documentos y, por tanto, se evitaría así contraer la deuda aduanera.
El agente aduanero también es conocido como representante aduanero. Algunas empresas de transporte tienen a estos representantes en su plantilla, mientras que otras contratan al profesional para desempeñar el servicio.
En Asercomex tenemos personal acreditado para la tramitación de exportaciones e importaciones, facilitando el proceso a las empresas.